podrán

podrán cortar todas las flores;

siempre habrá un hombre semilla.

miércoles, abril 16, 2008

ENTRE HOY Y MAÑANA.

y para terminar el día tiro la basura, me pincho un poco de antiazúcares, me quito los postizos y termino de cubrirme el cuerpo con una sábana de cansancio.
El sueño, que es olvido pasajero y ligero del presente, a su vez me cubre con una manta de sin sentidos -en las noche de insomnio la manta tiene demasiados rotos por los que se cuela la realidad- y me permite ora gozar ora sufrir, ya nada más o ya todo menos.
Recuerdo noches de insomnio infantil en que oía nítidamente el sonido de la campanita en la garganta; y en la simbología infantil oir tal sonido era preludio de la muerte.
Ah¡ la muerte, la terrible y horrible muerte de la noche: negra, oscura, azabache que a veces se ha agarrado a los músculos de las piernas para chupar toda su energía..., que a veces ha parecido tintarme el cerebro con epidural a modo de mareo..., que a veces se cura con una ración de quietud o de larguero o de extremadura radio por vía intraoídos...
Pero pienso que mañana sucederá... y fantaseo que...
[...]
Hace tiempo que, al levantarme, ya no intento imaginar qué debiera sucederme; es más interesante esperar que suceda lo que haya de suceder y tal acontecer aunque no sea elemento de la secuencia debida o querida puede imponerse por no sé que razón, finalidad o previsión.
En ocasiones me he deseado los buenos días y el deseo era principio de la más inesperada torcedura o nubarrón gris...

No hay comentarios: