JESUCRISTO SUPERSTAR GETSEMANI
yo creí en la cruz tanto como en la sed,
en el desierto y en el hambre;
yo creí en la cruz
pero de la cruz huí
cuando supe que llevar mi cruz
no era tan glorioso
como pasearse ignominioso
por las calles de Jerusalén;
mi cruz eras tú
insignificante hijo de perra
adoptado por la reina
y emperametriz de las zorras;
mi cruz eras tú pordiosero
y mendigo del dinero
por excusa de la maldición
que me obliga a ganar el pan
con el sudor de mi rostro
pero no con el escalofrío
ni la desesperación de mi alma;
mi cruz eras tú
que la llevas en tu pecho
porque toda ella
había huido de tu alma...