Entre los imponderables de Teléfonica y unos deberes inexcusables no he podido aparecer en estos días; sin embargo SIGO VIVO, pese a que SU MAJESTAD NO SIGUE EN SU IMPORTANTE SALUD (con esta frase remedo una antigua frase hecha del Boletín Oficial de la Provincia de Badajoz durante los años finales del reinado de Isabel II y que nada tiene que ver con la actual monarquía sino con...).