SÓLO PIENSO EN TÍ.

Sólo pienso en tí, le decía el reloj a las horas del día como si fueran pétalos de margarita que se pudieran arrancar para escudriñar el futuro.
El reloj no sabía que aquellas horaspétalos eran como las respuestas de los oráculos de los dioses: los dioses, interpretaba Heráclito, no declaran el futuro; sólo lo indican (y tal indicación estribaba en la voz de la sibila).
Sólo pienso en tí, le decía el reloj a las horas del día como si fueran burbujas en las que mirar el futuro.
El reloj no sabía que aquellas horasesferas eran tan huecas como tan huecas eran las bolas de cristal de los vanos adivinos.
Pero el reloj seguía diciendo sólo pienso en tí .
Y pensar en tí, decía el reloj, es como soñar plácidamente a la sombra de una galaxia mientras por mis ojos cerrados pasan todos los escenarios y los sucesos del mundo; sí, intentar pensar en alcanzarte es como transformar los pétalos de una margarita infinita en la respuesta, siempre esquiva o vana, de los dioses [Tratado Literario de las Rectas Paralelas].

SÓLO PIENSO EN TÍ: