podrán

podrán cortar todas las flores;

siempre habrá un hombre semilla.

sábado, abril 21, 2007

POÉTICA IV. DE CONTRADIcCIONES.




Cojo otro archivador definitivo y lo primero que veo es una servilleta en donde se lee:

Viento negro, madera;
madera que no es río,
el agua devendrá en planeta.
¿Dónde poner al hombre,
dónde ocultar la angustia?
Si es viento viento,
no llores tu existencia;
si los hombres olvidan
no habrá humanidad nueva.
El poema está fechado en Calamonte el 26 de enero de 1980 en el Bar "La Herradura".
También aparece un poema escrito en Mérida; corría el 20 de julio de 1979:
Serían todas
las sombras
con el reloj del mar
o tu presencia ignota.
-¿Qué hora es?
Ayer salí a la calle
antes de que
nuestro despertador
tirase al suelo
las sábanas del sueño.
- ¿Cómo te llamas?
Abrí la puerta,
tragué tu sangre
y me eché a caminar.
Abro otra carpeta y aparece un gran puñado de servilletaspoemas. En cierta ocasión quise trasladarlas a un poemario y titularlo SERVILLETERO, pero como siempre esté tan ocupado con tantos descansos o actividades...
Por una de estas servilletaspoemas sé que me encontraba en Jaraíz de la Vera e 16 de julio de 1978 escribiendo que [N.B.no sé qué ocurre pero se ha impuesto el "modo sobreescribir" y me borra las correcciones].
Cuatro existencias
fonéticas
y luego
la muerte;
morirme yo
y morirse el
alma en el esqueleto.
Una mano femenina había escrito a modo de propuesta para un poema música, sueño, noche, cielo, estrella.
En ocasiones los poemas se multiplican en cien versiones:

Todo tuyo, la noche de mi boca,
la noche de aquel pájaro sonrisa;
todo tuyo, en el pecho la prisa
sobre el mar océanos de agua loca.
o todo tuyo, la noche de mi boca
en la frente de un pájaro sonrisa.
Soy todo tuyo, desde el sol clavel
nombre, espejo del día
sobre el mar oceáno de esperanza.
Todo tuyo, el silencio de los pies
y la sonrisa roja de los labios.
Tú y yo existimos sobre el hombre abismo
escribiendo en sus músculos perdidos
una fuerza infinita de sol a vida
hundiendo en el vacío del crepúsculo
la semilla perenne de agua a río.

o
Todo tuyo, el viernes y la duda,
el reloj de pared y la mentira.
Sobre el mundo galopan diez encinas
que pregonan a viento tus ojos
raíz profunda bajo cosmos amor.
y aparte

amo a tientas, soy
el agua.

Y para terminar transcribo un poema escrito en Valladolid el 19 de febrero de 1976:
Largas y espesa barbas,
negro de muerte resucitante.
En este momento
me llamo sentado a una silla,
apoyado en una mesa
escibiendo un poema.
Ya he dicho lo posible;
queda por decir lo imposible,
lo que fuí, lo que seré
o lo que jamás podré ser:
una canción eterna en un río continuo,
un grito perpetuo en un atáud eterno...
(una cruz desprendida a destiempo).