podrán

podrán cortar todas las flores;

siempre habrá un hombre semilla.

lunes, enero 22, 2007

DE LOS INICIOS FOTOGRÁFICOS DE CEFERINO LÓPEZ EN EL TEATRO ROMANO DE MÉRIDA.


Ceferino López es uno de los escasos creadores extremeños que, sin descolocarse, se ha impuesto como una figura relevante de la fotografía española e internacional; nuestro común pasado calamonteño me hizo conocer íntimamente sus primeros momentos y circustancias como fotógrafo “artístico” a principios de los años setenta del pasado siglo y poseo, por ello, una pequeña pero muy valiosa colección de sus primeras aperturas de diafragma.
Actualmente, entre otras numerosas ocupaciones artísticas, Ceferino, que es el diseñador de la página oficial del Museo Nacional de Arte Romano, desarrolla la de fotógrafo oficial del Festival de Teatro Clásico de Mérida.
Curiosamente uno de sus primeros reportajes, entonces le interesaba plasmar el movimiento, lo realizó en el Teatro Romano de Mérida y el modelo fue el autor de este cuaderno de bitácoras.
No había elegido Cefe mal lugar para definir el movimiento: allí convergían en plena sazón el tiempo y todos sus efectos y yo como personaje abstracción dirigiéndome -tempus fugit- peldaño a peldaño hacia...
En ocasiones pocas, es el hecho que describo, en la fotografía no sólo hay técnica adecuada o sensibilidad artística expresa y creatividad siempre sobrepujando; también hay, simplemente, filosofía. Y mi caro amigo Ceferino López Reyes, el calamonteño más universal al que nadie nunca vió alterado, que abrió los ojos por ver primera a la luz de Mérida, aún inspira el aliento eterno de esta ciudad; eso quiere decir que aunque el tiempo huye él lo detiene , a veces, en un lugar y en un individuo con un incruento disparo de arte que los eterniza en una sola pero suficiente dimensión dotada de natural belleza, sea en un trozo de papel semirígido o sea en una más morigerada pantalla de ordenador.