podrán

podrán cortar todas las flores;

siempre habrá un hombre semilla.

domingo, febrero 04, 2007

TRATADO MÍNIMO DE LA ESPIRAL, V.


o EL CANON DE LA ESTÉTICA CRISTIANA: DE LOS NÚMEROS FI Y EU.
Es un hecho de general cumplimiento que el Cristianismo es presentado, las más de las veces, como un movimiento religioso escasamente original, especialmente desde el siglo XIX; y lo presentan con tan poca dotación original hasta sus propios correligionarios más avispados intelectualmente que ven en sus dogmas y en su liturgia numerosas correspondencias evolutivas idolátricas o filosóficas griegas cuando no reacciones para llenar los huecos que producían.
Pues bien tras considerar los Cánones de la Belleza Egipcia y Griega voy a tratar del sorprendente y muy original Canon de la Belleza Cristiana que me inspiró la Pasión de Santa Eulalia de Mérida.
El Canon de la Belleza Cristiana no está basada en la Proporcionalidad del Cuerpo Humano respecto del Universo simbolizado por el número φ; sino, con independencia de la adecuación corporal, la Armonía del Hombre joven o maduro, o de la Mujer o del Niño o de la Niña se basa en su Bondad como Ser Humano; y esta Bondad se expresaba más diáfanamente en los números de que se dotaba a los mártires: particular y expresamente a las mártires por su virginidad les correspondía el número 60 (LX) y por su cruento Testimonio el 100(C).
Pues bien, considerando que la Línea Dividida de Platón es "nada más y nada menos" que la simbolización de la Tabla sobre la que se extendían las víctimas de los sacrificios idolátricos…
le di valores cristianos a esta tabla en la que se extendían simbólicamente los cuerpos de los mártires de forma que medía, por ello, 160, es decir 100 más 60
Entonces encontré un nuevo número al que denominé Eu (por Santa Eulalia de Mérida) : 1´666
Este número está en relación proporcionada con los números del Hombre (DCLXVI= 666) y de Dios (M=1000-deducido éste por defecto-) según interpreto de Apocalipsis 13, 18 al hacer, por mi parte, un uso conspicuo de los siete Símbolos Numerales del Sistema Romano de Numeración; en realidad 1´666 es la “División del Hombre por Dios”, o el Reencuentro del Hombre y Dios, o...
N.B. Las vírgenes cristianas estaban consideradas como anticipo de los seres paradisíacos y, a través de su muerte en martirio, alcanzaban la beatitud o plena madurez paradisíaca.